Pongan carteles en el Metro de Madrid y en los autobuses para que respeten nuestro espacio

Pongan carteles en el Metro de Madrid y en los autobuses para que respeten nuestro espacio

Todos los medios de transporte llevan colocados unas pegatinas en las que se explica que hay que dejar sitio a las mujeres embarazadas, personas con carrito de bebé, mayores y gente con alguna discapacidad, pero hay algo en lo que no han caído y que nos afecta a todas prácticamente cada día que montamos en el transporte público: el manspreading.
El manspreading (algo así como "hombre espatarrado") es la práctica de algunos hombres de sentarse con las piernas abiertas en el transporte público, ocupando el espacio de las demás. No es algo que ocurre de forma esporádica, si te fijas te darás cuenta de que es una práctica muy común. No es difícil ver a las mujeres con las piernas cerradas y muy incómodas porque hay un hombre a su lado que está invadiendo su espacio con las piernas.
No es cuestión de mala educación sino de que igual que a las mujeres nos han enseñado a sentarnos con las piernas muy juntas (como si tuviéramos que sujetar algo entre nuestras rodillas) a los hombres les han transmitido una idea de jerarquía y de territorialidad, como si el espacio les perteneciese.