Legislen para impedir la usura y que miles de familias sean estafadas cada año

Legislen para impedir la usura y que miles de familias sean estafadas cada año
Por qué es importante esta petición

Me llamo Monchi y, como miles de españoles en los últimos años, he sido víctima de una estafa en un préstamo hipotecario.
Mi esposo y yo pedimos a un prestamista 19.000€ para poder pagar la retroexcavadora que nos permitía tener trabajo e ingresos. Tras firmar la escritura y poner como garantía nuestra vivienda, recibimos solamente 3.000 en efectivo. La segunda parte del dinero, que supuestamente nos abonaría una entidad bancaria, jamás nos llegó. Fue el fruto de una operativa elaborada para inducir a engaño, en la que intervinieron varias intermediarias, junto a un farsante que usurpaba la identidad de un director de banca y la connivencia de un notario. Tenemos interpuesta una querella por estafa.
Tras meses de angustia insoportable, de intentar solucionar la situación sin conseguirlo, mi esposo, Javier, no pudo más y acabó quitándose la vida. Nuestro hijo, que padece una discapacidad psíquica, me pregunta cada día por su padre.
La estafa no sólo me arrebató la vida de mi pareja y hará que mi hijo crezca sin padre. Ahora el usurero quiere también quitarme mi vivienda. El préstamo que recibí llevaba incorporados unos intereses de demora del 29% y el usurero me exige pagar 36.000 Euros al contado. Si no podemos pagar, se adjudicaría la casa donde vivimos y nos desahuciaría a mi pequeño y a mí. Como ya le ha pasado a Carmen, del barrio madrileño de Vallecas, como a Umberto, de Tetuán, y como a tantos otros que han pasado por esto.
Mi caso no es una excepción. Un gran número de familias han denunciado en toda España haber sufrido hechos similares por parte de la misma red que a nosotros nos estafó. Y no es la única trama que actúa de forma similar.
Por eso, junto a la asociación Stop Estafadores, estoy pidiendo a los poderes públicos que modifiquen la legislación para que nunca más se puedan producir hechos como éstos. Queremos que se reforme la Ley 2/2009 que regula los préstamos hipotecarios no bancarios, que a todas luces ha resultado insuficiente, para que se limiten de forma clara las comisiones y los intereses aplicables, impidiendo la usura.
Firma esta petición y ayúdanos a conseguirlo. Que nadie más sea víctima del afán de lucro de estos prestamistas desalmados. Que nadie más pierda su casa. Que nadie más pierda su vida.