Comunicado de solidaridad con la periodista venezolana Andreína Mujica

Comunicado de solidaridad con la periodista venezolana Andreína Mujica
Por qué es importante esta petición
Andreina Mujica, fotógrafa y periodista venezolana, radicada desde hace diez años en Francia, es objeto de una querella entablada por Glenna Cabello, cónsul de Venezuela en París y hermana de Diosdado Cabello, uno de los hombres más poderosos del régimen totalitario venezolano, por emitir opiniones en redes sociales en 2019, en los que la periodista exigía la liberación del también periodista Luis Carlos Díaz, detenido del régimen. Difícilmente semejante acción judicial contra la libertad de expresión prosperaría en Francia, un país en el que la democracia es un valor intrínseco y es la cuna de libertad de pensamiento, expresión e información.
Pero lo que preocupa es el precedente que se intenta sentar con esta medida arbitraria. Si bien en Francia la justicia, en cuanto a libertad de expresión se refiere, funciona de manera impecable, el caso de Andreina Mujica abre la puerta para que, en países con instituciones menos sólidas, o en donde la libertad de expresión puede ser considerada un delito, se desarrollen acciones similares contra quienes se encuentren fuera de Venezuela y continúan denunciando la dictadura venezolana. En Madrid iniciaron una demanda por difamación contra el periodista David Placer por denunciar la corrupción del régimen
El caso de Andreina Mujica es una demostración de que el régimen busca extender sus tentáculos para amordazar a los venezolanos donde quiera que se encuentren. No le basta con haber instaurado la censura en el país, haber cerrado cientos de medios de comunicación—emisores de radio, canales de TV— o haber obligado, por medio de presiones económicas y judiciales, a los propietarios de medios a cerrar o a vender los medios de comunicación más emblemáticos del país.
Roland Carreño, cronista social tiene más de siete meses preso. Pero la escalada arrecia. En los últimos días han detenido a la periodista y escritora Milagros Mata Gil por escribir una crónica que molestó a un ministro del régimen y al poeta y escritor Rafael Rattia, por un artículo de opinión.
Al extender este panorama de persecución y amedrentamiento al ámbito internacional, la dictadura venezolana se alinea con la de Cuba en donde mediante una ley se dispone que las personas que participen en denuncias contra el régimen pueden ser procesadas en ausencia. Lo más grave es que esta arremetida contra cualquier disidencia se inserta en un modelo
implementado no solo en Cuba sino en Rusia, Nicaragua, Turquía, Irán, China y por sus actores desestabilizadores en países que, por ahora, forman parte de las democracias mundiales.
Quienes firmamos expresamos nuestro apoyo a Andreina Mujica y con ella a todos los periodistas y escritores perseguidos, acosados, detenidos y atemorizados por el régimen de Nicolás Maduro dentro y fuera del país.
Firmas:
Golcar Rojas, escritor
Elizabeth Burgos. historiadora
Carol Prunhuber, escritora y periodista