Dumba es una elefanta de 41 años que pertenece a una especie declarada en peligro de extinción. Cuando era una cría vivía en Asia, en estado salvaje. Fue capturada y ahora sus "propietarios", que viven en Cataluña, la utilizan para alquilarla a circos de todo el mundo y a empresas del sector audiovisual. 

Cuando no trabaja, Dumba permanece sola, en el jardín de sus "dueños", un espacio muy pequeño si tenemos en cuenta sus dimensiones y sus necesidades. El jardín carece de enriquecimiento ambiental y está delimitado por un pastor eléctrico. Estas instalaciones no solo son inadecuadas para Dumba sino que acabamos de descubrir que además son ilegales: incumplen las normas urbanísticas vigentes y supuestamente carecen de licencia para tener un animal potencialmente peligroso.

Tenemos que hacer algo para sacar a Dumba de ahí. Los elefantes son muy sociales y pueden recorrer entre 20 y 50 kilómetros en un solo día, viven en grandes grupos y establecen entre ellos fuertes vínculos que duran toda la vida. La falta de contacto con otros elefantes suponen para ellos un auténtico maltrato. No podemos dejar que Dumba siga malviviendo en esas condiciones. Desde hace unos meses presenta un evidente y preocupante deterioro físico que la Generalitat no debe seguir consintiendo.

Firma para pedir a la Generalitat de Catalunya que decomise a Dumba. Tienen la obligación moral y legal de actuar para acabar con las condiciones a las que está sometida esta elefanta. Y desde FAADA ya contamos con varias opciones de santuarios para el animal, que tras años de explotación se merece un retiro digno.

En 2014 las autoridades constataron diversas irregularidades en las instalaciones de Dumba, también relacionadas con el bienestar del animal, y concedieron 6 meses para que su "dueña" realizara los cambios necesarios y previstos, pero ya han pasado 4 años de aquello y ni sus "propietarios" han adecuado las instalaciones ni la Generalitat de Catalunya ha hecho algo para sancionar a los "dueños" y decomisar a la elefanta.

La única solución es sacar a Dumba de allí. Las instalaciones no se pueden legalizar porque se encuentran sobre un terreno de interés público. Y Dumba ya ha sufrido demasiado trabajando de circo en circo y viviendo tantos años aislada de otros elefantes. Se merece que ahora hagamos lo posible por garantizar que pasará el resto de su vida en mejores condiciones que las que ha tenido hasta hoy.

Firma para pedir a la Generalitat de Catalunya que actúe para salvar a Dumba.