Durante la madrugada del sábado 13 de agosto fueron encarcelados injustificadamente 64 alumnos pertenecientes al Instituto de Artes de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH). Los alumnos fueron víctimas de acoso, violencia psicológica, verbal y física por parte de la policía.

Al momento de los hechos, los alumnos salían de manera gradual de una fiesta con intenciones de llegar a sus casa, pero los oficiales fueron “cazando” uno a uno y aprehendiendo de manera violenta, a algunos los sometieron civiles armados sin ninguna identificación, sin uniforme oficial que acreditara que eran elementos policiacos, sin lectura de sus derechos o del por qué estaban siendo detenidos ¡Todo un acto de arbitrariedad!

Las vivencias de los alumnos son compartidas, cada uno fue expuesto a violencia de todo tipo. A las mujeres las amenazaron con desnudarlas y violarlas, a varios alumnos los golpearon y a uno le dieron una golpiza al grado de temer seguir estudiando. También, los policías hicieron apologías de asesinarlos como a Fernando Daniel Solís; el caso de un estudiante que fue encontrado en su departamento sin vida tiempo atrás.

Sin mencionar que, distintos alumnos, posterior al ataque perpetrado por los oficiales, siguen sintiéndose acosados, ya que las patrullas los siguen en su caminar o les hacen sonar sus sirenas con intenciones de hostigarlos y molestarlos.

Los elementos policiacos no deben fungir como un ejercicio caprichoso, persecutorio e injustificado de la fuerza pública. No debemos permitir que casos así sigan instalándose en nuestras sociedades y comunidades, mucho menos, a sectores tan vulnerables como los estudiantes, dónde algunos se encuentran lejos de sus hogares.

Por todo ésto, pedimos colectivamente a la Procuraduría General de Justicia del Estado de Hidalgo que se esclarezcan los hechos cometidos hacia el alumnado y se reprenda con baja de labores por cometer brutalidad policiaca. A la par, hacemos un llamado al presidente municipal, Alejandro Sierra Tello, para que reconsidere las estrategias de vigilancia y contención, y que el personal encargado de la seguridad pública opere de manera inteligente para prevenir el delito, NO que sea cómplice de la injusticia. FIRMA Y COMPARTE.