Mi nombre es Romina Zejdlik. Soy de la Provincia de Córdoba, mamá de un adolescente con Trastorno del Espectro Autista y presidente de la fundación Por la Inclusión Plena.

Mi hijo, al igual que muchos dentro del espectro, necesitan por indicación médica contar con la práctica de acompañante terapéutico para su rehabilitación. Digo práctica y no prestación porque lamentablemente pese a que en la Provincia se aprobó la Ley 10393 de acompañantes terapéuticos, nunca se reglamentó.

Es por eso que le queremos solicitar al Ministerio de Salud de la Provincia  que se reglamente esta ley de manera urgente. Se le están privando a miles de niños y niñas una mejor calidad de vida.

El Acompañante Terapéutico cumple un rol ESENCIAL en la vida de sus pacientes  ya que es "un agente de salud con formación teórico-práctica que brinda atención personalizada tanto al paciente como a su familia en la cotidianeidad, con el fin de colaborar en la recuperación de su salud, en su calidad de vida y en su reinserción social dentro de un marco interdisciplinario.." (Ley 10393, de la provincia de Córdoba).

Dicha situación afecta tanto los acompañantes terapéuticos como a sus pacientes originando muchas barreras a la hora de acceder a la prestación:

1) Muchas obras sociales no quieren autorizar esta práctica o se demoran demasiado en hacerlo. 

2) Al no haber un monto reglamentado el el nomemclador oficial, cada obra social decide arbitrariamente el sueldo de los AT el cual en la mayoría de los casos termina siendo escaso e indigno.

3) Deterioro y desvalorización de una práctica humanizante como es la del  acompañamiento terapéutico.

Por todo lo anterior, desde la fundación Por la Inclusión Plena, el gran colectivo de personas que con discapacidad y familias que representamos, acompañantes terapéuticos y demás profesionales de la salud solicitamos que de manera urgente, que se regularice la situación de los AT y se reglamente su profesión. ¡Acompañanos con tu firma!

Muchas gracias.