La iniciativa de reforma a la Constitución en materia de energía enviada por el presidente López Obrador al Congreso es una amenaza para México, ya que pretende:

1.      Que la CFE[1] deje de ser empresa productiva del estado y se convierta en el organismo responsable del área estratégica de planeación y control en materia de electricidad.
2.      Eliminar los órganos reguladores incorporando la CRE[2] y la CNH[3] a la SENER[4] y transfiriendo a la CFE las funciones del CENACE[5], lo que convertiría a la CFE en juez y parte, de manera que los generadores privados quedarían sujetos a las decisiones de su competidor.
3.      Entregarle a la CFE el 54% de la producción de energía, lo que impediría el desarrollo del país y perjudicaría a los consumidores. La CFE opera con plantas caras y no tiene la capacidad requerida por el crecimiento de México, pero los productores privados no podrían competir porque estarían en una desventaja abusiva. Se impediría la creación de empleos y habría apagones y alza de precios.
4.      Cancelar todos los permisos para la generación de energía eléctrica y los contratos de compraventa de electricidad, violando así la no retroactividad de las leyes establecida en el artículo 14 constitucional e incumpliendo tratados internacionales. Esto desataría una interminable serie de batallas legales dentro y fuera del país, además de que la desconfianza ahuyentaría la inversión.
5.      Cancelar los certificados de energías limpias y eliminar los mecanismos para incentivar la generación de energías renovables, lo que retrasaría la transición de México a la generación de energías no contaminantes y traería daños a la salud de los mexicanos al promover la generación de electricidad con combustóleo.

En síntesis, la iniciativa pretende borrar procesos, organismos y mecanismos que tomó décadas construir e implementar, a la vez que atenta contra las leyes, contra el desarrollo del país, contra el medio ambiente y contra los derechos de la ciudadanía a la salud, al empleo y a energía eléctrica barata.

PARA QUE SEA APROBADA SE NECESITAN DOS TERCERAS PARTES DE LOS VOTOS DE LOS DIPUTADOS, POR LO QUE EL PAPEL DE LOS LEGISLADORES DEL PRI SERÁ CRUCIAL. ES EL MOMENTO PARA QUE DEFIENDAN A MÉXICO, PARA QUE DEMUESTREN QUE SÍ SON PARTE DEL BLOQUE DE CONTENCIÓN POR EL QUE VOTAMOS, QUE SE ACABARON LOS VOTOS POR INTERESES PERSONALES O PARTIDISTAS, LOS ABUSOS Y LA CORRUPCIÓN. EL PRI DEBE DEMOSTRAR QUE APRENDIÓ DE LA HISTORIA Y QUE PUEDE DESEMPEÑAR UN PAPEL IMPORTANTE EN EL FUTURO DE MÉXICO.

[1] Comisión Federal de Electricidad [2] Comisión Reguladora de Energía [3] Comisión Nacional de Hidrocarburos [4] Secretaría de Energía [5] Centro Nacional de Control de Energía