En la campaña electoral de la Comunidad de Madrid de 2021 ha vuelto a utilizarse la imágen de un personaje perteneciente a una saga de Disney, para ser exactos se ha utilizado a Rey, de Star Wars, para pedir el voto a una determinada formación política.

Disney se supone una compañía de productos destinados sobre todo a la infancia y al disfrute familiar, en esa idea no puede haber lugar para él proselitismo de ningún tipo y menos cuando puede implicar a menores de edad que se ven llamados hacia un ideario político tan solo por la utilización de una imágen reconocible y querida por esos menores sin que en muchos casos sepan o puedan comprender ideario alguno.

La politización de figuras de ficción, animadas o no, de consumo infantil es una forma vergonzosa de hacer política a pié de calle y no se puede ni se debe consentir.

¡Basta ya! Dejad a los menores en paz con asuntos políticos.

¡Disney fuera de las campañas electorales!