No Mas Mujeres y Hombres Oncológicxs Muertos

No Mas Mujeres y Hombres Oncológicxs Muertos
Por qué es importante esta petición

Pobre acceso a tratamiento y otros factores hacen que a diario mueran 50 pacientes en el país.
Para dimensionar su impacto, es necesario decir que en Colombia, este mal lo padecen al menos 229.374 personas, según la Cuenta de Alto Costo (CAC), que maneja las cifras más optimistas. Y que tan solo en el 2017 fueron 32.818 nuevos diagnósticos y 18.071 muertes, en especial por cáncer de mama y de próstata. Aclarando, por supuesto, que estos números podrían ser mayores por un subregistro.
Colombia es uno de los pocos países de la región en donde está cubierta integralmente la atención, persisten barreras administrativas que entorpecen la vida de los pacientes.
Prueba de ello es un estudio de la Fundación Colombiana de Leucemia y Linfoma publicado el año pasado con 165 pacientes de leucemia mieloide crónica (LMC). Los participantes no reportaron negaciones explícitas de procedimientos o tratamientos, aunque sí demoras frecuentes en las autorizaciones, y más aún en la dispensación de medicamentos. El 24,2 por ciento de ellos dijeron no haber recibido la totalidad de cajas de medicamento para su tratamiento de ocho meses, y 102 manifestaron haber suspendido su medicación en algún momento por razones no médicas, la principal: la demora en la entrega por parte de la farmacia.
Yolima Méndez, presidenta de la fundación, explica que los pacientes con LMC reciben terapias orales de manejo ambulatorio, por lo que dependen de la celeridad del sistema de salud para poder cumplir con las indicaciones médicas. “¿Cuáles son las medidas de control para las EPS que no garantizan la entrega de la totalidad de los tratamientos a sus pacientes?”, cuestiona Méndez.
El estudio con personas que padecen LMC también evidenció que 65 por ciento de ellos debieron recurrir a alguna acción legal para garantizar la continuidad del tratamiento. Y para rematar, 30 por ciento de los que acudieron a una acción de tutela interpusieron luego un incidente de desacato.
Lo que aquí se contará no es nuevo, pero sí preocupante: en Colombia hacen falta especialistas para tratar el cáncer. En realidad, no se sabe cuántos médicos preparados para tratar esta enfermedad hay en el país. El Ministerio de Salud no tiene un registro de especialistas, valga decir. Y en el mejor de los escenarios, hay 250, sumando hematólogos, oncólogos y hemato oncólogos, según la Asociación Colombiana de Sociedades Científicas.
Dice Javier Ignacio Godoy, presidente de la Asociación Colombiana de Hematología y Oncología, que la figura de este especialista es clave para la supervivencia de los pacientes, pues tiene a su cargo el curso de la enfermedad desde el mismo momento del diagnóstico. A ese gremio hay afiliados apenas 180, reconoce.
Si se toman las cifras de Globocan y los otros registros distintos a la CAC, según los cuales hay cerca de 90.000 nuevos diagnósticos anuales, y se divide con el dato tentativo de Sociedades Científicas, en Colombia cada oncólogo debería recibir al año 360 nuevos pacientes para cubrir la totalidad de la atención.
Una proporción reveladora, teniendo en cuenta que la recomendación de la Sociedad Española de Oncología Médica, por ejemplo, es 158 nuevos casos por oncólogo médico a tiempo completo y que en Perú hay un oncólogo por cada 331 pacientes nuevos; en Argentina, uno por cada 287; en Brasil, uno por cada 170, y en Uruguay, uno por cada 108, según la Encuesta global sobre la fuerza de trabajo en oncología clínica, publicada hace un año y en la cual no aparece nuestro país.