Carmen Peñalver Navarro ha sido una docente que ha desarrollado toda su vida profesional en Benamaurel, primero como Maestra y luego, como Profesora de Lengua y Literatura; así mismo, ha sido Directora tanto del colegio de primaria como del instituto de secundaria.

Si bien, su dilatada carrera profesional ha sido brillante y siempre ligada a Benamaurel, ha sido su compromiso con la formación (en el sentido más amplio de la palabra), así como su liderazgo y carisma los que le han hecho elevar su figura a la dimensión de personaje; término que define la R.A.E. como persona de distinción, calidad o representación en la vida pública.

Carmen es una persona polifacética que además de docente, es Cronista Oficial de Benamaurel, habiéndonos ilustrado con todos los acontecimientos históricos que nuestro pueblo ha vivido; también ha sido corresponsal de prensa en Benamaurel, siempre procurando que se conociera lo mejor de nuestro municipio y de nuestra gente pero, sobre todo, ha sido una mujer comprometida con la formación de los jóvenes, especialmente preocupada con aquellos que, por razones económicas o sociales, corrían el riesgo de abandonar su proceso formativo; entró en las casas para convencer a padres y madres, rellenó becas de su puño y letra, pagó de su bolsillo material escolar; su tenacidad, obró, en muchas ocasiones, el milagro de que se formaran personas que estaban condenadas a no hacerlo.

Son muchas las muestras de apoyo que todo el pueblo de Benamaurel, así como el sector docente, están haciendo en pro de esta iniciativa. Algunos de los sentimientos que, de forma espontánea, han expresado cientos de personas cuyas vidas se vieron enriquecidas gracias a la calidad profesional y personal de Carmen Peñalver, son los siguientes: “inculcó ideas de libertad y superación”, “dejó su vida en educarnos”, “su perfume impregnó las almas de todos”, “nadie como “la tita” (así se le conocía en tono cariñoso) ha hecho tanto por tantos como docente y como un “pedazo” de mujer adelantada a su tiempo”, “nos marcó a muchos de sus alumnos, tanto en la clase como en el comportamiento fuera de ella, una mujer con principios y valores”, “una gran persona y una gran mujer”, “que el IES de Benamaurel se llame Carmen Peñalver, es justo reconocimiento a una labor callada, constante y sin cara a la galería”; “Carmen me ayudó en mi inexperiencia y gracias a ella y a su Mini, pude terminar mis estudios en Granada”; “por ser la brújula que activó los imanes de la curiosidad, el conocimiento y la sabiduría entre sus alumnos”; “hizo valer su condición de mujer en un mundo de hombres”; “era una mujer con trato  de igualdad con respecto al hombre, era atendida, escuchada y respetada”; “para las niñas de aquella época era un modelo a imitar”; “ella marcó la diferencia entre la vida de nuestras madres y su vida”; “la señorita Carmen, devino en Doña Carmen, no por tener un hombre a su lado sino porque todos le hemos mostrado respeto, ese que tanto se merece porque ha sido un eslabón de cambio de mentalidad”.

Por todo lo expuesto, y por mucho más, dos hitos tan importantes que tenemos en nuestro pueblo en materia de educación, como son nuestro Instituto de Enseñanza Secundaria y la figura de Carmen Peñalver, deben quedar unidos para siempre. Este sería el verdadero homenaje que ella se merece y que el pueblo de Benamaurel estaría orgulloso de rendirle.