El servicio de ambulancias de la Comunidad de Madrid es vergonzoso, deplorable, inhumano,… Sin duda debe ser un buen negocio para la empresa que ganó el contrato de ambulancias en la Comunidad de Madrid, pero lo que ellos ganan lo han perdido los enfermos que deberían ser la prioridad, lo más importante, lo que da sentido a este servicio.

Basta una mala experiencia como la última que tuvimos con nuestra madre, de 94 años, para afirmar lo que decimos. Llevaba hospitalizada 7 días en el Hospital Clínico San Carlos. El día que le dieron el alta, 23 de marzo de 2022, estuvimos 10 horas esperando a que viniera una ambulancia para llevarla a su casa. El médico que atendía a nuestra madre, al ver su grado de inmovilidad y dependencia, solicitó esa ambulancia a primera hora de ese 23 de marzo. Toda una mañana para organizar los servicios que tuvieran a lo largo del día, ya que la hora estimada para recogerla y llevarla a su casa eran las 15:30 de la tarde. Hasta las 01:18 de la madrugada no vinieron dos celadoras a buscarla para llevarla hacia la ambulancia.

Sabemos que no es un caso aislado. Al comentarlo con otros enfermos, con familiares que residen en la Comunidad de Madrid, con amigos, con el personal del hospital y con compañeros de trabajo que han necesitado una ambulancia, supimos de muchas otras malas experiencias en cuanto a esperar horas para que vinieran a recogerlos desde el transporte sanitario. 

No podemos normalizar el maltrato, venga de donde venga. Y si el maltrato viene de un servicio público (aunque lo hayan contratado sigue siendo público), debemos unirnos para exigir que se gestione de modo impecable y que lejos de empeorar, mejore constantemente. No es solo cuestión de exigir nuestros derechos… , no es solo porque lo primero en una sociedad humanista, debe ser la salud y la educación… no es solo porque se paga con dinero público (dinero que, en el caso de mi madre ha aportado y sigue aportando con sus 94 años y que todos mantenemos gracias a nuestros impuestos), … no es solo porque el cuidado de nuestros mayores y de cualquier enfermo está por encima del dinero…  no es solo porque si consentimos que se degrade un servicio público estamos dejando una mala herencia a nuestros hijos, a las siguientes generaciones… no es solo por uno de esos motivos, sino por todos ellos. 

Una atención digna implica, como mínimo: menos de 1 hora de espera para los enfermos, y en algunos casos urgentes ni 15 minutos; ambulancias que no den botes como si no tuvieran amortiguadores; suficientes camilleros y conductores para que estos no estén agotados y lleguen “tarde y mal” a los servicios que tienen que hacer.

Firma exigiendo una atención digna y humana en el servicio de ambulancias de la Comunidad de Madrid y si ocurre en cualquier otro territorio del estado español, reclámalo también.