Desde hace años, estamos oyendo que el planeta está en peligro a causa de la industrialización. En cambio, no solo el planeta está sufriendo, pero nosotros también. Por lo tanto, hoy debemos reaccionar rápidamente adoptando una nueva forma de vida dejando de lado las prácticas nocivas, y por lo tanto desarrollando el uso de las semillas campesinas. 

En efecto ahora, alrededor de mil millones toneladas de comida se desperdician en el mundo, mientras que la comida despedida en Europa podría ser suficiente para alimentar el 100% de la gente sufriendo de malnutrición en el mundo. Además de permitir un equilibrio en la producción alimentaria, desarrollar una agricultura basada en un modelo ecológico, podría permitir reducir la polución y por eso proteger la biodiversidad. Cientos de animales están en efecto ahora en peligro de extinción. Nosotros también viviremos una vida más saludable, sin peligro de contraer enfermedades provocadas por la agricultura industrial. También, podríamos hablar de los trabajos que la agricultura ancestral podría dar. Efectivamente, con la industrialización, el 36% de empleos en Francia ha desaparecido. Hay también muchos agricultores que encuentran dificultades.

En consecuencia, adoptar un modo de vida ecológico significa desarrollar productos locales, los pueblos pueden obtener alimentos nutritivos y culturalmente adecuados. Las semillas campesinas promueven una producción sostenible y productos de calidad.

Para concluir, salvar el planeta no significa adoptar un estilo de vida difícil. Al contrario, la agricultura ecológica puede traer a nosotros mucha dulzura mientras nos hace gustar las cosas buenas. Convertirse en un héroe, por lo tanto, en última instancia, no es tan difícil como parece.