PARA QUE LA RN N° 33 SEA AUTOPISTA

PARA QUE LA RN N° 33 SEA AUTOPISTA

Señores Ministros y Presidente de la Nación:
Tengo el agrado de dirigirme a Ustedes para poder manifestar la experiencia vivida recientemente al transitar por la RN N° 33.
Conozco esa ruta desde su inicio en Bahía Blanca hasta su finalización en Rosario. Ruta Nacional que recorre parte del corazón productivo del país, desde el puerto de Bahía Blanca al puerto de Rosario y, también podría decir de San Lorenzo. RN que atraviesa (en sentido inverso a su nomenclatura), el sur de la provincia de Santa Fe y, como una columna vertebral, casi la totalidad de la Provincia de Buenos Aires.
Como es de su conocimiento, es una RN que transita uno de los cordones más importantes de la cadena agroindustrial, agroexportadora, agroalimentaria, turística y cultural, petroquímica y naviera del país. RN que une al Océano Atlántico con el Rio Paraná; grandes ciudades y pueblos son atravesados por la misma; complejos aceiteros, petroleros, papeleros, comerciales, industriales, de servicios, logísticos, químicos, de energía eléctrica convencional y eólica, de gas natural, cuencas lecheras, campos de producción agrícola ganadera, el complejo acuífero y sus recursos ictícolas de las “Lagunas Encadenadas del Oeste” y otras menores en el resto del territorio santafesino y bonaerense, el sistema serrano de Ventania, la producción de cebollas, ajos y otras economías regionales, sus intersecciones con otras rutas nacionales y provinciales que componen la red vial de la República, al encontrarse con las RN 3, 5, 226 y 188, 7, 8 y 178, por nombrar las más importantes.
Es poco entendible cómo esta arteria fundamental para el desarrollo nacional sea, en su mayoría, una ruta de una sola mano, en partes en muy mal estado (pozos, ondulaciones y deformaciones), mal señalizada, con cruces de Rutas Nacionales y Provinciales sin rotondas o puentes, que mejoren su circulación y disminuya la probabilidad de accidentes de tránsito; que aún hoy pueblos y ciudades sean atravesados por la misma y que en otro casos los accesos a las ciudades desde la ruta, no cuenten con, por lo menos, una dársena de giro que evite el tener que cruzarse en contramano sobre la cinta asfáltica para ingresar a las localidades. Otra situación increíble son los pasos a nivel que la cruzan, algunos de vías muertas y otros de ramales activos, que hacen disminuir la velocidad del tránsito a lo que vulgarmente se conoce como “a paso de hombre”.
También es importante destacar el desgaste que se produce en los vehículos de todo porte, el circular por rutas en estas condiciones. No solo por una cuestión mecánica y de economía familiar/empresarial, sino también por una cuestión de seguridad personal, de los mismos automotores y maquinarias y de los bienes transportados.
A modo de ejemplo y para una mejor ilustración, le voy a describir la experiencia de un viaje realizado recientemente por mí desde la localidad de 30 de Agosto a la ciudad de San Lorenzo (Santa Fe).
Les puedo decir que el peor tramo de ruta es el que une a 30 de Agosto con Trenque Lauquen (trayecto que, por cuestiones laborales, realizo ida y vuelta de lunes a viernes); el cruce llamado “Siete Primos”, es la intersección de la RN N° 33 con el acceso a 30 de Agosto (al este) y a Tres Lomas (al oeste). Este cruce es conocido por su alta estadísticas de accidentes viales, mala iluminación, señalización y estado general de conservación. Continuando con el recorrido desde 30 de Agosto a Trenque Lauquen, éste se encuentra mal señalizado (carteles y pintura en ruta, en general), la calzada está deformada en varios kilómetros - lo que provoca se inunde parcialmente los días de lluvia - haciendo aún más peligroso el viaje, presencia de pozos y mala mantención de banquinas, entre lo más importante.
De Trenque Lauquen a Villegas la situación es similar, agregando que los accesos a la ciudad de Trenque Lauquen que desembocan en ella, se encuentran mal iluminados, escasamente señalizados y no cuentan con una rotonda, puente o dársena de giro apropiada.
De Trenque Lauquen a Villegas, pasando por América, la situación se repite mayormente en todo el tramo; es para destacar por su peligro y precariedad, la intersección con la RP N° 70.
Llegando a Villegas, es inadmisible la intersección de las tres Rutas Nacionales que se encuentran (la RN N° 33, la 226 y la 188); son cruces librados a la suerte y fortuna de los viajeros, pésimamente señalizados y demarcados, sin ningún tipo de seguridad vial más que el puesto de Policía de Seguridad Vial de la Policía de la Provincia de Buenos Aires.
De Villegas a Rufino, es cierto que se está trabajando y el tramo ha sido mejorado, aunque lejos se encuentra de una condición óptima de circulación, repitiéndose situaciones como las antes descriptas, con el agravante de la existencia de “chichones” de asfalto sobre las banquinas.
Desde Rufino y hasta Rosario, comienza lo más tragicómico. A todo lo descripto anteriormente se suma el aumento del tráfico de camiones de gran porte y, lo más sorprendente, pueblos y ciudades atravesados íntegramente por la RN; semáforos sobre una RN para permitir el cruce de peatones y la “vida normal” de las localidades. Por citar sólo un ejemplo, porque la situación se repite similarmente en varias poblaciones, la vereda norte de la plaza San Martín del pueblo de Pujato da directamente a la RN N° 33.
Continuando con el viaje, llegando a Zavalla, me encuentro con una autovía que cruza sobre nivel a la RN N° 33; resulta ser la AO12, que corre paralelamente a la Avenida Circunvalación 25 de Mayo, ambas circunvalando a la ciudad de Rosario. Me doy por enterado que es la AO12, luego de consultar una App de mi teléfono celular, porque no hay un solo cartel que así lo indique. El único cartel que recuerdo haber visto era una que indicaba “CÓRDOBA” y una flecha a la izquierda (yo estaba transitando en sentido Sur - Norte).
De Zavalla a Rosario, las situaciones se repiten, pero no habría nada más para agregar a lo hasta ahora dicho. Pero ya circulando en la Avenida Circunvalación 25 de Mayo, no hay un solo cartel que indique la salida para San Lorenzo y subir a la Autopista Rosario – Santa Fe; si hay para hacerlo por la RN N° 11 (otra que atraviesa localidades y pueblos). Si uno no sabe de antemano que debe girar a la derecha en la salida que indica “Santa Fe – Paraná”, sube al puente conocido como “Rosario – Victoria”, teniéndolo que atravesar, para luego retomar el sentido hacia la provincia de Santa Fe y lograr subir a la autopista que lo lleva a San Lorenzo. Al acercarse a San Lorenzo, existen tres bajadas (San Lorenzo Sur, Centro y Norte). Solamente la Sur y la Norte están con carteles que indican la bajada; en la bajada para San Lorenzo Centro, el cartel está cuando sale de la autopista y va circulando por la salida (el cartel no se divisa desde la autopista).
Para hacer el tramo de aproximadamente 200 kilómetros desde Venado Tuerto a San Lorenzo, viajando siempre por la RN N° 33, la Avenida Circunvalación 25 de Mayo y la autopista Rosario - Santa Fe, tardé alrededor de 3 horas.
Ya de regreso, decido salir de San Lorenzo por el sur y encontrarme con la RN N° 33 viajando por la AO12. Lamentablemente, circulando por la avenida San Martín, no se visualiza cartel alguno que indique cómo tomar la AO12.
En la AO12 se da prácticamente la misma situación que se describe desde el comienzo.
Al llegar a la intersección con la RN N° 34 y posteriormente con la RN N° 9, se utilizan semáforos para ordenar la circulación del tránsito. En esos lugares deberían existir puentes o rotondas; no puede ser que la circulación de dos rutas nacionales se vea interrumpida por semáforos, sinceramente es inadmisible. Pero para agravar más la situación, en uno de las intersecciones (no recuerdo en cual), no funcionaban los semáforos. O sea que el tránsito estaba dirigido por personal policial de la Policía de la Provincia de Santa Fe.
Continúo por la AO12 y veo que por debajo del puente pasa una ruta, la cual supuse que era la RN N° 33. Lamentablemente, el único cartel que indicaba RUTA NACIONAL N° 33 se encontraba 10 kilómetros antes de llegar a la intersección. Ese cruce, el que en otro párrafo mencioné en que solo había un cartel que indicaba “CÓRDOBA”, no tiene la más mínima señalización, ni circulando por la AO12 ni por la RN N° 33, que indique qué arterias son las que cruzan ni qué localidades cercanas hay. Es más, el cartel que indica que para dirigirse a Zavalla se debe girar al este y para ir a Pujato, al oeste, está luego de que uno cruza el puente, o sea después de la bajada. Realmente de no creer.
Para hacer el tramo de San Lorenzo a Venado Tuerto, viajando por la AO12 y la RN N° 33, otra vez aproximadamente 200 kilómetros, tardé 3 horas con 45 minutos. Una barbaridad.
Las demoras se dieron por el intenso tráfico, los pueblos y ciudades que atraviesan las rutas, los semáforos y la mala señalización.
Dicho esto, creo que es de vital importancia rehacer la RN N° 33 en toda su extensión. No puede continuar en la situación en que se encuentra. ¿Cuánto tiempo se ahorraría y dinero se ganaría si fuera una autopista?... Ya todos sabemos que el tiempo es dinero, pero en este caso también es seguridad vial, salud y eficiencia. Entiendo que el beneficio de que la RN N° 33 sea autopista será mucho mayor a la erogación que produciría su construcción. No solo por el tiempo en que se tardaría, sino por la menor cantidad de recursos destinados a la atención de accidentes, la disminución de los costos de logística y una mayor capacidad de transporte que directa o indirectamente influiría sobre las exportaciones y economías regionales.
Sinceramente, sentí la necesidad de expresarles mi opinión y crítica, pero no para tirar malas ondas. Totalmente lo contrario, para, aunque sea con estas líneas poder contribuir al mejoramiento y desarrollo de la Nación. No se trata de un tema de banderías políticas ni de quien gobierna en cada jurisdicción, se trata de un asunto de Estado, de un tema que debe preocuparnos y ocuparnos a todos por igual.
Atentamente.