Exigimos que se cree un plan de regreso a las aulas para niños y adolescentes en Argentina para 2021, bajo pautas de cuidado para el conjunto de la comunidad educativa.

Necesitamos que se piense en la salud psicológica, emocional y vincular de nuestros jóvenes; a quienes estamos aislando de sus pares, generándoles secuelas que probablemente duren para toda su vida. 

Debemos tener en cuenta, principalmente, a aquellos niños que se encuentran en situaciones de mayor vulnerabilidad, que en muchos casos no pueden acceder a clases virtuales por falta de acceso a la tecnología. Además, viven diariamente situaciones de violencia doméstica, sin poder acudir a ningún tipo de salvataje institucional. 

En Europa las escuelas ya se encuentran funcionando bajo los protocolos correspondientes. Incluso, se constituyen como una forma de detección temprana de casos positivos. 

Por todo esto, exigimos a las autoridades de todo el país una respuesta para que nuestros niños puedan acceder al derecho universal de la educación. Que contemple la situación de la educación actual, teniendo en cuenta las realidades epidemiológicas y sociales del país, de cada provincia y municipio. Y que desarrolle planes de contingencia apropiadas para los posibles escenarios, centrándonos en los intereses reales de los más pequeños.