La Selección española de fútbol debuta el próximo lunes en la Eurocopa ante Suecia en el estadio sevillano de La Cartuja donde jugará tres partidos, los días 14, 19 y 23 de junio, además de la disputa de otro partido de octavos de final el día 27. La sede andaluza sustituye finalmente a Bilbao, que iba a albergar en un principio la cita.

Las entradas salieron a la venta el pasado 1 de junio, con preferencia durante un día para quienes adquirieran en su día entradas para San Mamés y se habían visto obligados a devolverlas. 

El problema llega cuando, una vez compradas las entradas, que oscilan entre los 50 y 185 euros, la guía del aficionado para Sevilla, publicada con posterioridad, detalla que se ha de presentar una PCR (hasta 72 horas antes) o un test de antígenos (en las 24 horas anteriores) negativos con el fin de poder hacerse con la pulsera acreditativa y poder así entrar al estadio en cada partido. 

Esta circunstancia no se avisaba en las medidas previas a la compra de manera clara -había que bucear hasta lo más recóndito de la web de UEFA-, lo que ha provocado la indignación de los aficionados ya que, además del coste extra de los test, desde los 40 a los 100 euros, complica enormemente la logística de acceso y además es un requisito que no se ha exigido hasta ahora durante la pandemia para acceder a los recintos deportivos en España por lo que es claramente discriminatorio.  

Por lo tanto solicitamos a las instituciones organizadoras la eliminación de la obligatoriedad de presentar una PCR o un test de antígenos o, en el caso de mantenerla, la asunción de las pruebas por su parte y sin coste para los aficionados con entrada para poder acceder a los partidos que se disputen en el estadio de La Cartuja.