Las escuelas, ya están abiertas, los restaurantes ya están abiertas, incluso los centros de diversión ya están abiertos, ¿por qué no abrir la Zona Arqueológica de Tehuacán y su museo de sitio?

Es una zona abierta, sin riesgos de contagio y uno de los pocos atractivos que nos quedan en Tehuacán, su apertura activaría el turismo y la economía, se promociona nuestro patrimonio y lo protege. 

Además es urgente su apertura ya que de esa forma los tehuacaneros conoceremos el estado del museo y sus piezas ante el insistente rumor de que las piezas serán trasladadas a otro lugar. 

En Tehuacán las piezas son el centro de la visita al museo y la misma zona arqueológica, son parte indispensable para entender, para aprender, para disfrutar por horas tal vez, su belleza. En cambio, si se las llevan al majestuoso Museo Nacional de Antropología e Historia, solo serán unas más entre miles de piezas, si acaso serán novedad un rato.