Alto a la Agresión Sonora de las Constructoras contra Humanxs y Animales

Alto a la Agresión Sonora de las Constructoras contra Humanxs y Animales

Somos familias compuestas por human@s y animales domésticos, residentes en la comuna de Providencia de Santiago. Actualmente la tierra de nuestra comuna, carente de un plan regulador que nos integre, está siendo atormentada por Proyectos Inmobiliarios (defendidos por el Gobierno de Sebastián Piñera E.) cuyas construcciones superan los decibeles permitidos, generándonos tortura auditiva durante largas horas, mientras permanecemos encerrad@s en casa bajo sanción de cometer delito contra la salud pública y queriendo proteger nuestra salud y la de nuestr@s vecin@s.
El Director de Obras Municipales y el Alcalde (S) de Providencia, tienen la facultad de restringir los horarios de estas faenas y la obligación por mandato constitucional de proteger nuestra salud y nuestra integridad física y psíquica. Sin embargo, transcurrido más de 15 días no responden nuestras peticiones y permanecen silentes, mientras soportamos largas horas de faenas de trabajo dentro de nuestros hogares.
Nuestro derecho a la vida y a la salud es un derecho de consciencia, lo adquirimos desde que nacemos y nos pertenece hasta el día de nuestra muerte. Las cartas magnas de las naciones del mundo lo reconocen y protegen. Ninguna actividad económica es más importante, ninguna inversión es más importante, ninguna riqueza y ninguna familia (ni su riqueza) en Chile es más importante. Fin a los proyectos de quienes se dicen millonarios en pesos y se durmieron en la fantasía del capitalismo, perdieron su consciencia y su espíritu y divagan en trastornos voraces que los han llevado a apropiarse hasta del Agua, mientras millones soportamos las consecuencias de su ausencia de virtud y estupidez. EN CHILE NO HAY GRUPOS PRIVILEGIADOS.