El momento es ahora: Pablo, cállate

El momento es ahora: Pablo, cállate

Querido Pablo:
Cada vez que dices algo, dañas de manera muy importante cualquier posibilidad de que se consolide en España una izquierda que se mueva por el mundo del siglo XXI con los mapas de este siglo y no con los de la Europa de la guerra francoprusiana, es decir, una izquierda que se dirija a la gente de hoy y no a la de muchas décadas anteriores, una izquierda que apele a toda la población y no sólo a una minoría hiperideologizada y atrapada en dogmas políticos hace décadas caducados. Por eso, quiero pedirte humildemente, amigo Pablo, que, por favor, hagas un curso de contabilidad, o de costura, o de fontanería, o de alta cocina, o de lo que más le guste, qué sé yo: escribe una novela, dedica tu tiempo a cuidar tu jardín, relee a Kant o tradúcelo al sánscrito, pon El Capital en sonetos (mira que te doy ideas para que llenes tu tiempo), pero, por favor, deja de hablar todo el rato sobre todas las cosas. No es necesario estar todo el tiempo hablando: si no tienes nada que decir, o lo que dices va a causar más daño que bien, no hace falta que digas nada.
Sin otro particular, ten la seguridad de que te aprecio en lo que vales, y te envío un cordial saludo