Pami quiere implementar una nueva forma de pago a los kinesiólogos a nivel nacional que precariza su situación laboral y que perjudicaría a sus afiliados. Quiere pasar de pagar por cada sesión de rehabilitación a pagar por cápita, es decir que les pagaría a los kinesiólogos SOLO 21  PESOS POR MES POR  PACIENTE. Por lo que no solo muchos profesionales se quedarían sin trabajo sino que los afiliados de Pami se quedarán sin atención. En Kinesiología los profesionales cobran por sesión un arancel mínimo obligatorio, que los colegios profesionales de cada provincia establecen a través de leyes. Por lo que PAMI actualmente, no solo paga menos de los aranceles ya establecidos,  sino que con el nuevo convenio que pretende implementar el pago sería miserable.