Abrogar la LIVG, Ley Integral de Violencia de Género en España

Abrogar la LIVG, Ley Integral de Violencia de Género en España
La LIVG (Ley Integral de Violencia de Género) es una ley totalmente anticonstitucional y que no respecta los derechos humanos mas básicos, ya que está basada sobre una diferencia de condenas y trato según el sexo de la víctima o del presunto agresor. El imputado, que puede ser solamente varón y heterosexual es además juzgado en un tribunal especial llamado "Violencia Sobre la Mujer" y es la única circunstancia en Europa donde la supuesta víctima puede ser también testigo y se puede detener a un hombre solo por ser varón, simplemente basándose en la palabra de una mujer, sin pruebas ni testigos. Es usada sistemáticamente en España por muchas mujeres y sus abogados para que la madre pueda quedarse con los hijos, la casa y obtener muchas ventajas económicas solamente con poner una denuncia. La espera para el juicio suele ser entre 3 y 4 años. Un tiempo en el cual los hijos menores de edad muchas veces no pueden ver a sus padres y a sus familias paternas. Padres que a la espera de un juicio se hunden moralmente, psicológicamente y económicamente, junto con sus familiares y/o parejas. Además el mismo tribunal decide si, cómo y cuándo los imputados puedan ver a sus hijos en espera del juicio y como faltan puntos de encuentro familiar, en la práctica los hijos de padres imputados se quedan años sin poder ver a sus progenitores y en muchísimos casos dejan de tener cualquier tipo de contacto con ellos. En el 2020 ha habido 150.000 denuncias y en el 2021, 156.000. Durante ambos años se han archivado mas del 80% de estas denuncias como sobreseídas o absueltas. Pedimos que se derogue urgentemente esta ley por ser anticonstitucional y por vulnerar los derechos básicos de cientos de miles de hombres y menores todos los años y que además se ha convertido en un gran negocio lucrativo para decenas de organismos públicos, cientos de asociaciones pseudo-feministas y muchos abogados sin escrúpulos. Un negocio que quita fondos europeos a los necesitados, provocando además que las verdaderas victimas de violencia machista terminen desatendidas por falta de medios y recursos, ya que sus denuncias quedan sepultadas bajo cientos de miles de denuncias falsas.