Los ciudadanos de Balcarce, y nuestros animales domésticos, padecemos a diario el estrés del estruendo que provoca la práctica de tiro en un lugar, que con el tiempo, se ha convertido en una zona completamente poblada. Los perros tienen una capacidad auditiva mucho mayor que el humano y no distinguen la práctica inofensiva del peligro real, el sonido no sólo los enardece sino que despierta en ellos la sensación de ataque inminente. Al no ser seres racionales, este estado anímico puede provocar conductas indeseadas y acabar mordiendo o incluso matando a otros animales y/o humanos, en algún momento de desesperación. Es imprescindible que esta práctica de tiro se traslade a una zona alejada del sector poblado, donde los inconvenientes que ocasione sean menores y no incluyan altos riesgos para la comunidad.

Muchas gracias!

Ayuda Animal Balcarce